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La Cumbre de París aprueba un histórico acuerdo ‘legalmente vinculante’ para frenar el cambio climático

La Cumbre De París Aprueba Un Histórico Acuerdo ‘legalmente Vinculante’ Para Frenar El Cambio Climático

Cerraron hasta las cafeterías. La burocracia del clima estivo a punto de sofocar la sensación de «trascendencia histórica» que se llegó a respirar en la cumbre de la COP21. Las 195 delegaciones dieron al final el visto bueno al Acuerdo de París, que fija como objetivo «mantener el aumento de las temperaturas por debajo de los dos grados con respecto a los niveles preindustriales» e insta a todos los países a «perseguir los esfuerzos para limitar el aumento a 1,5 grados».

El plenario se puso en pie y aplaudió durante más de dos minutos a Fabius, el auténtico «facilitador» del Acuerdo de París, que se sumó al presidente François Hollande, al secretario general de la ONU Ban Ki moon y a la máxima responsable del cambio climático en Naciones Undidas, Christiana Figueres, en una foto de familia para la historia.

En contraste con lo ocurrido hace seis años en Copenhague, con un «carpetazo» final que dejó el sinsabor del fiasco, la cumbre de París ha concluido en un tono autocelebratorio, entre abrazos, «selfies» y sonrisas.

El ministro de Exteriores francés Laurent Fabius dio el martillazo «verde» (y lo volvió a dar para las cámaras) poco antes de las 7.30 de la tarde, después de preguntar en voz alta si había objeciones, y que ninguno de los delegados -ni siquiera los de Arabia Saudita, que tanto entorpecieran las negociaciones- se atrevieran a levantar la manoa.

El texto, jurídicamente vinculante, deberá ser ratificado por todos los países la próxima primavera y no entrará en vigor hasta el 2020. Los gobiernos se comprometen alcanzar el techo de emisiones gases invernadero «lo antes posible»y a poner en marcha un mecanismo de financiación de 100.000 millones de dólares para medidas de mitigación y adaptación al cambio climático.

Desde primera hora de la mañana, se respiraban aires de trascendencia histórica en París. El presidente de la Cumbre del Clima (COP21) de París y ministro francés de Asuntos Exteriores, Laurent Fabius, ha presentado con los ojos vidriosos por la emoción ante el plenario el texto de acuerdo global de lucha contra el cambio climático que los países prevén aprobar a primera hora de la tarde.

«El texto contendrá una referencia a que el objetivo de aumento de temperatura serán dos grados, pero invitando a trabajar por 1,5 grados«, ha asegurado Fabius, agregando que el documento será «legalmente vinculante».

«Este acuerdo es necesario para todo el planeta», dijo en su intervención. Antes de levantarse y de recibir un largo y sentido aplauso por parte de los cientos de delegados presentes, Fabius quiso hacer un último reconocimiento al trabajo común de los negociadores. «Hay cosas que parecen imposibles hasta que están hechas», dijo. «Nadie por sí sólo puede lograr el éxito, el éxito se consigue de forma colectiva».

La emotividad del discurso de Fabius -quien terminó su discurso al borde de las lágrimas, al igual que la traductora simultánea que traducía al inglés sus palabras– y la ovación sonada de un plenario puesto en pie reconociendo el tremendo trabajo diplomático del mandatario francés hacen pensar que cuenta con el apoyo mayoritario de las 196 delegaciones presentes en las conversaciones.

Pero habrá que esperar hasta el plenario convocado para esta tarde para saber si todos y cada uno de los países apoyan un acuerdo ante el cambio climático que podría ser histórico.

El documento fue presentado ante el plenario por Fabius acompañado por el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, y por el presidente francés, François Hollande, cuyas palabras estuvieron salpicadas de referencias emocionales y aplausos improvisados que escenificaban la atmósfera de trascendencia histórica que emanaban los delegados presentes.

«La naturaleza nos está enviando un mensaje. La gente está amenazada. Tenemos que proteger el planeta que nos acoge«, ha dicho Ban Ki-moon. «El final ya está a la vista. Dejennos terminar el trabajo. El mundo entero está mirando», sentenció.

Hollande, por su parte, quien también tuvo palabras para recordar los terribles atentados que azotaron a la capital francesa pocas semanas antes de la cumbre, se unió a la invitación a cerrar un acuerdo que permita de una vez por todas comenzar a atajar el aumento de la temperatura global. «Hoy, el 12 de diciembre, puede ser un día histórico en el que tengamos un acuerdo histórico. Háganlo posible», aseguró.

El texto es fruto del trabajo de una tercera noche consecutiva de vigilia de la Presidencia francesa, que ha transformado el último borrador en un pacto universal con las inquietudes planteadas por cerca de 200 países en 24 horas de intensas reuniones bilaterales.

Según ha informado previamente Naciones Unidas a The Guardian, el texto de consenso se ha alcanzado a las 4.30 horas de la madrugada después de más de 24 horas de negociación y reuniones bilaterales.

Desde primera hora de la mañana todas las señales que salían de la sede de la Cumbre del Clima de Le Bourget hacían pensar que finalmente había consenso. De hecho, fuentes de una delegación europea que tuvieron acceso al texto final acordado durante la madrugada aseguraron a este diario que el acuerdocontendría la mejor de las opciones posibles en cuanto al capítulo de Pérdidas y Daños, lo que supone una muy buena noticia para los países insulares y aquellos en vías de desarrollo que sufrirán en mayor medida los efectos del cambio climático sin haber sido responsables en modo alguno de las emisiones que lo causan.

El propio comisario europeo de Energía y Cambio Climático, Miguel Arias Cañete, escribía un mensaje en Twitter horas antes que invitaba al optimismo en el que decía: «This is it» («Ya está»).

La delegación china comentó a EL MUNDO su opinión sobre algunos aspectos del borrador del acuerdo. «Las conversaciones esta noche han sido duras, pero delicadas», afirmó a este diario Feng Gao, representante especial para el Cambio Climático del Ministerio de Asuntos Exteriores de China. «Pero, sí, estamos satisfechos con la diferenciación acordada entre países desarrollados y en vías de desarrollo».

No quiso dar más detalles sobre este asunto, porque «es información que está en borrador del acuerdo, pero no está aún acordado», matizó Gao. Además, el representante chino manifestó el apoyo de su delegación al objetivo de limitar el incremento de temperatura a 2ºC, «trabajando duro para avanzar hacia un límite de 1,5ºC».

 

http://www.elmundo.es/ciencia/2015/12/12/566be5edca4741417e8b4609.html

 

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